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Gran muestra sobre Gramsci en Moscú

El filósofo italiano Antonio Gramsci vivió en la entonces Unión Soviética entre 1922 y 1923, como delegado del Partido Comunista Italiano (PCI) en el Comité Ejecutivo de la Internacional Comunista.
    En el Museo Estatal de Historia de la Literatura Dahl de Moscú abre la exposición dedicada a sus famosos Cuadernos de la cárcel, que por primera vez salen de los límites de la Unión Europea.
    Los Cuadernos, expuestos una sola vez fuera de Italia en 2017 en el Instituto Italiano de Cultura de Londres, se conservan habitualmente en la Fundación Gramsci de Roma.
    “Se trata de un evento de extraordinaria importancia desde el punto de vista histórico y cultural por cuanto permite reabrir un debate en Rusia sobre el legado político y la memoria histórica vinculándolo con la figura de Gramsci, poco conocido para el público ruso”, comentó Olga Strada, directora del Instituto Italiano de Cultura de Moscú.
  Si la muestra londinense estuvo dedicada exclusivamente a los Cuadernos, en Moscú el objetivo es más amplio: dar a conocer al público el pensamiento, la personalidad y el destino de Gramsci, dado que en Rusia solo lo conocen los estudiosos, mientras en Italia y en toda Europa se lo considera como una figura clave del siglo XX.
 Un destino extraño, considerado que la biografía de Gramsci está indisolublemente vinculada con Rusia. Allí conoció a Julia Schucht, hija del revolucionario Apollon Alexandrovich Schucht, muy cercano a la familia Ul’janov y amigo personal de Lenin.
   Julia dio a luz dos hijos: Delio y Giuliano, cuyos hijos, los nietos de Antonio Gramsci, todavía viven en Moscú.
   En la muestra se exponen documentos únicos, libros, cartas (en italiano y ruso) procedentes de la colección del Archivo Estatal Ruso de Historia Social y Política, fotos y objetos personales de la colección del nieto del filósofo, Antonio Gramsci “el joven”.
  Entre las reliquias de familia se presenta un cenicero que, fumador empedernido, Grasmci usó hasta el final de su vida, y “El príncipe” de Nicolás Maquiavelo, que lo acompañó durante todo su período de prisión y fue fuente de inspiración para la redacción de los “Cuadernos”.
    La muestra abrirá hasta el 7 de julio en la nueva sede del Museo Dahl.

Fuente: www.ansalatina.com https://bit.ly/2YRlT7p


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©Graciela Cutuli


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