Hoja por Hoja

Proyecto editorial & Revista literaria online

Tertulia: un juego de cartas que invita a leer y conversar

Hoja por Hoja Avatar

Por Teresa Teramo

Hay hallazgos que uno agradece. Entre tantos stands y propuestas de la última Feria de Editores de Buenos Aires, me encontré con un pequeño tesoro: Tertulia, un juego de cartas inventado y producido en la Argentina. No es casual que haya nacido en el corazón de la FED, un espacio que desde hace años viene dando lugar a las editoriales independientes, a la circulación de nuevas voces y a ese clima de conversación que solo generan los libros cuando se ponen en el centro de la mesa.
Tertulia parece sencillo: un mazo de cincuenta cartas, preguntas impresas, un diseño cuidado. Pero detrás de esa aparente simpleza se esconde un gesto poderoso: devolverle a la lectura la dimensión del juego, del diálogo y de la comunidad. No se trata de responder trivialidades ni de “ganar” en el sentido competitivo –aquí todos ganan. Lo que propone el juego es abrir un espacio de palabra compartida, en el que cada participante pueda desplegar su experiencia lectora, sus memorias y hasta sus contradicciones.
Las propuestas de juego son cinco y tienen nombres que ya anticipan el espíritu lúdico: “Una que sepamos todos”, “Tibieza obliga”, “Me prendo fuego”, “Los picantes”, “Los
íntimos”. Cada dinámica ofrece un ritmo distinto: desde la espontaneidad de responder lo que la suerte depara, hasta el filo de elegir a quién lanzar una pregunta incómoda o íntima.
Es un repertorio que oscila entre lo familiar y lo desafiante, entre la tibieza del recuerdo y el fuego de la confesión. Sin embargo como también expresan las “reglas” de juego: “El mazo tiene tantas formas de jugar como usos posibles. Es ideal para una juntada con amigos, para ponerle onda a un cumple, una cita o la sobremesa del domingo. Vos elegís dónde, con quién y cómo jugarlo. Si al terminar la partida te llevaste una nueva lectura, este juego tuvo sentido.”
Detrás de la iniciativa está Tinkuy, editorial argentina que apuesta a los juegos literarios y a esas experiencias donde la palabra circula de otra manera. La FED, que en sus últimas ediciones llegó a convocar a decenas de miles de lectores, fue el marco ideal para lanzarlo: ¿qué mejor que un espacio nacido de la conversación sobre libros para dar vida a un mazo que multiplica las conversaciones?
El juego se presenta con datos técnicos claros —pueden jugar de dos a veinte personas, está pensado para mayores de dieciséis, dura unos treinta minutos—, pero la realidad es que se adapta a cualquier sobremesa, taller o encuentro de amigos. Su fuerza no está en las reglas, sino en lo que despierta: risas, confidencias, debates, recuerdos de infancia, recomendaciones inesperadas. En definitiva, ese tejido invisible que une a quienes leen.

En tiempos donde la lectura suele vivirse como una práctica solitaria, Tertulia devuelve la experiencia a un plano colectivo, casi festivo. Es un juego, sí, pero también un espejo de lo que somos como lectores y como comunidad. Lo extraordinario es que esta idea haya surgido aquí, en Argentina, y que circule de manera independiente, artesanal y cercana, como un recordatorio de que los libros no solo se leen: también se juegan, se cuentan, se comparten.


Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

©Graciela Cutuli


Sitio web diseñado y desarrollado por Axel J. Dumas Cutuli (axeldumas@hotmail.com) y Micaela Fernández (ffmicaelab@gmail.com)